Antònia Font y el retrato del ‘padrí’


Portada de A Rússia de Antònia Font

2001 / Antònia Font ya deben estar calentando motores para su esperadísimo regreso. La separación del grupo, en 2013, dejó un hueco difícil de llenar, ya que su sonido y sobre todo sus letras eran algo tan fresco como difícil de copiar. Inspirados quizás por la intuición galáctica de Sisa, algunas veces han reivindicado también la influencia de Kiko Veneno en sus primeros discos. Hoy, a la hora de explicar una de sus portadas, nos vamos también a uno de esos primeros trabajos. En 2001, la banda mallorquina publicaba A Rússia y comenzaba a ganarse un lugar en el panorama musical estatal. Aquel disco ya apuntaba las que serían sus grandes virtudes: pop fresco (en su caso el tópico de pop mediterráneo estaría más justificado que nunca) y las historias tan características de Joan Miquel Oliver, siempre poéticas y evocadoras.

Para la portada del disco, el grupo no pudo escoger una opción más acertada. El rostro que aparece mirando al frente, con el mar de fondo, fue pintado por Joan ‘Revilo’ Oliver, abuelo paterno de Joan Miquel (padrí, en mallorquín). En una entrevista publicada por la revista Enderrock en abril de 2001, el músico explicaba el sentido de aquella elección. «Tiene un mensaje muy importante. Mi abuelo era un pintor aficionado y lo que quería hacer era hiperrealismo, pero le salía una cosa rara. Y así resulta más gracioso porque tiene más naturalidad. Todo esto refleja muy bien nuestra ideas. Cuando tenemos una canción, nos ponemos a trabajar en ella, pero no sabemos cómo acabará saliendo. La fórmula de Antònia Font también es el resultado de la casualidad, o de la inconsciencia», explicaba Joan Miquel Oliver.

Si A Rússia sentó las bases de lo que sería Antònia Font, la consolidación definitiva llegó un año después con Alegria, posiblemente su mejor disco. Tras la disolución del grupo en 2013 Joan Miquel Oliver continuó su carrera en solitario (iniciada ya mucho antes) y publicó su último trabajo en 2020: Aventures de la nota LA. Ahora Antònia Font vuelven en directo, renacen en primavera.

La canción

‘FOCS ARTIFICIALS’. No es fácil concluir que estamos ante un tema radiante y optimista con conceptos como meriendas de musgo, manos confitadas o cuerpos rebozados de arroz. Pero así son los mundos surrealistas de Antònia Font que se desgranan en estrofas en las que sobresale una batería en plena batucada para acabar en un estribillo de arreglo épico y mensajes de amor.