Las 3 portadas de… Igor Paskual


A Igor Paskual lo conocemos como guitarrista de Loquillo, pero ha hecho un poco de todo en el mundo de la música. Tuvo su propia banda, Babylon Chat, es compositor, productor, incluso ha escrito un par de libros… podría decirse que es un obrero incansable del rock’n’roll, inquieto e intenso. Por si todo eso fuera poco, de (más) joven se licenció en Historia del arte y pasea una elegancia especial. Nos explica que durante los bolos se aficionó a explicar a sus compañeros de gira el patrimonio histórico de las ciudades en las que tocaban, y que ahora incluso ha impulsado un proyecto al margen de la música, EspañArte, que podéis consultar en Instagram (@espanarte_). Cápsulas de historia en un minuto, dice. Quizás es por eso que cuando le pedimos que nos hable de 3 portadas de discos que sean especiales para él, enseguida tiene claro que serán producto nacional. Aquí las tenéis:

‘ILEGALES’, de Ilegales (Epic, 1982)

«Cuando el rock fue moderno. Era rock, pero sonaba afilado, breve, escueto y estaba en completa consonancia con otros grupos del momento. La portada, de Ouka Lele, refleja exactamente lo que hay en el disco. La vida cuando está muy cerca de la muerte, o al revés. Lo curioso es que la portada, que es pura Ouka Leele y parece que está muy asociada a una época, es atemporal. La pagó Paco Martín, según cuenta en sus memorias, que fue uno de los grandes descubridores del pop y rock nacional, y se fijó en ellos, aunque finalmente lo editó Epic. Le costó 50.000 pesetas.

Ouka Leele es grandiosa y merece la pena detenerse en su obra. Y en el disco, claro, que este año cumple 40 años. Uno de los diez mejores discos de la historia del rock español.»

‘ANDURIÑA’, de Juan y Junior (Zafiro, 1968)

«Esta es la historia de una no portada, que resume muy bien lo que era este país. Así que quienes hacemos música, tenemos que agradecer mucho a los que estuvieron antes de nosotros. Los músicos mayores han mejorado las cosas a base de darse cabezazos y de deslomarse. Cuando Juan y Junior terminaron la grabación de Anduriña, un periodista gallego le puso la canción, aún sin editar, a Picasso. Al pintor le encantó e hizo una ilustración de una golondrina (Anduriña).

El dúo quedó muy emocionado y querían ese dibujo como portada, pero su sello discográfico, Zafiro, creía que era muy poco comercial y escogió una foto de ellos dos para este single. Picasso, el pintor fundamental del siglo XX, quedó relegado a la contraportada. Es de no creer.

Mientras que La Velvet Underground y los Rolling Stones tuvieron a Andy Warhol y The Beatles a Peter Blake/Jann Haworth y a Richard Hamilton, aquí perdimos la oportunidad de tener al dúo de pop perfecto con Picasso en la portada.»

‘MORIR EN PRIMAVERA’, de Loquillo y Trogloditas (EMI, 1988)

«Es una portada que dice mucho. Primero, porque está hecha en Els Quatre Gats, uno de los centros básicos y fundamentales de finales del XIX y principios de XX en Barcelona. Este lugar sólo estuvo en marcha seis años, de 1898 a 1903, hasta que se reabrió en los 70. Y se reconoce por el característico suelo y por los arcos ojivales con las rejas del fondo.

En Els Quatre Gats Picasso realizó su primera exposición individual. El local estaba inspirado en otro de París, un  cabaret llamado Le Chat Noir, y era lugar de tertulias entre músicos, arquitectos, escultores, escritores… Además, editaban una revista. Lo llamativo no es que una banda de rock quiera asociarse a este lugar de resonancias finiseculares sino que en vez de tener pinta de banda de rock, parecen beatnicks norteamericanos de los años 50 esperando antes de un concierto de Coltrane, mientras que el Loco, eso sí, es puro Jacques Brel y tiene algo del Nick Cave post Berlín.

Sólo podríamos decir que pertenece a los 80 por el vaso de tubo que hay sobre una mesa, pero mezcla muchos lugares y épocas a la vez. Ahí está la gracia, de cómo el rock tomaba fragmentos de diversas fuentes, por eso era tan excitante. Hasta la tipografía del título y el nombre del artista tiene un punto art decó. No le falta nada.

Portada diez para un álbum sobresaliente con uno de los títulos más hermosos y evocadores de nuestro rock: Morir en Primavera.»